miércoles, 22 de octubre de 2008

Oda a la admiración secreta


Miradas tímidas, sonrisas delatadoras, invitaciones tan sutiles que pocos notan su sexual intención oculta.

Tus pensamientos divagan, no hay nada que pase por tu mente, algo ha sucedido. Esa persona te conquistó con la misteriosa fuerza de la conexión erótica.

Me pillaste viéndote, o habré de decir admirándote. Sonreímos juntos, pero la cereza del pastel de la sonrisa fue la mirada que nos cruzamos mientras un arco de gozo se dibujaba en nuestro rostro. ¿Sabrás que en mis adentros mi intención deliberada es coquetearte?

Mi corazón se quema por saber una respuesta, porque seguramente nunca volveré a verte. Quise llevarte a la alcoba para sumergirme en la espontaneidad natural de mi atracción prohibida. Más los pensamientos le pusieron freno al flujo del magnetismo, y en el abismo del olvido, caerá por siempre aquella conexión.

Un torbellino de deseos rondaron por mis venas en tu honor. Nunca lo sabrás, talvez lo sospecharás, al menos viví el momento, y en el puño de mi pluma digital vivirá por largos días.

viernes, 3 de octubre de 2008

Oda a los sexo-adictos

¿Qué es sexo sano? Practicar sexo sin hacerle daño a nadie. "Daño" está definido contextualmente, pero en términos generales el sentido común nos dice cuáles límites no cruzar. Una forma sencilla de delimitar el sexo sano es practicándolo sólo si queremos y con gente mayor de edad que conscientemente también quiere.

Habiendo dicho eso, le dedico este verso a los sexo-adictos que no cruzan tales límites:

"A todos los que se sienten malos, sucios, patológicamente tratados por la sociedad, amantes del exhibicionismo sano, con esa energía sexual candente que corre de su sexo hacia todas las terminales nerviosas de su cuerpo. Quienes entienden que los escapes sexuales de este mundo son necesarios para evadir la locura, quienes se distancian del color que esta sociedad le da a la sucia seducción sexual pero aún así saben embriagarse de ella de vez en cuando.

Quienes rompen reglas en el sexo, quienes lo encuentran como un correlato del físico del amor, para los que se han desilusionado de él y luego vuelto a nacer con un aire renovado. Los que tienen un sex appeal único y tienen miedo de explotarlo, quienes juegan la doble vida para no ser desnudados por los crueles prejuicios, aquellos que inhalan la belleza física y se inyectan con el placer de lo prohibido. Ustedes que representan lo que otros han negado y aquellos quienes han sido dotados por el universo del don del Sexo Desenfrenado.

No están solos."

Embríagate de sexo, desilusiónate de él, y luego reconcíliate para nunca más dejarlo...

Absolom

sábado, 17 de mayo de 2008

Tipos de Infidelidad Tercera Parte

Si en el artículo anterior vimos que las manifestaciones de infidelidad sexual involucraban generalmente al cuerpo, las de índole virtual no implican un contacto físico con otros entes, personas o animales. Este tipo de "infidelidad" podría ser visto no como tal, sino como un indicio de que algo malo se aproxima para la víctima -en otras palabras, la persona que le van a poner los cuernos- o bien como una especia de infidelidad parcial.

Las manifestaciones virtuales de infidelidad tienen que ver cuando el individuo o individua que está comprometido con una persona o personas en un vínculo afectivo, se imagina en su mente, teneindo una manifestación sexual con otra persona, ente o animal. Así mismo, cuando alguien tiene sexo por internet con otra persona o personas, ya sea a través de chat o video e inclusive cuando alguien tiene sexo telefónico con alguien fuera de su relación actual. ¿Se les ocurre más? A mi no. Lo que sí se me ocurre son variaciones de la misma clase. Por ejemplo, cuando alguien está en plena actividad sexual con su pareja o parejas y se imagina que está practicando sexo con otra persona, ente o anima, entonces podríamos decir que es una infidelidad virtual. Cuando un sujeto o sujeta se masturban pensando en alguien ajeno a su relación sentimental también entra dentro de ese ámbito, etcétere, etcétera.

Lo importante aquí, con respecto a este tipo de infidelidad, es que la tecnología está permitiendo cada vez más la proliferación de esta variante haciéndola más y más común, obligando de esta forma, a las esferas sociales a replegarse en cuanto a sus definiciones de lo que es y lo que no es la deslealtad de pareja. Las nuevas generaciones vienen más dipuestas, más tecnificadas, más abiertas y egoístas que nunca lo que probablemente incidirá en la conversión de la infidelidad virtual en una forma más, común y corriente, de socializar, sin que sus consecuencias sean funestas para cualquier relación sentimental que las practiquen.

Esta probabilidad se materializaría en un proceso sumamente lento, pues no hay nada más terco y obstinado que los dogmas y prejuicios sexuales en nuestros círculos culturales...

sábado, 10 de mayo de 2008

Tipos de Infidelidad Segunda Parte

Los tipos de infidelidad que se ramifican de la noción general de deslealtad que acabo de decir son los siguientes: -acepto que deslealtad e infidelidad pueden significar cosas diferentes, pero en aras de enriquecer el lenguaje pensemos que son una misma cosa en este artículo-

  • Infidelidad Sexual: Es la más común de todas. El problema es que dependiendo de la tolerancia de la víctima a la cual le estén poniendo los cachos, una aproximación sexual puede ser casi cualquier cosa. Esto significa que para honrar la mayor parte de perspectivas posibles, tendremos que identificar un espectro de infidelidades sexuales que van desde lo más extremo, hasta lo más tenue. Esta sublista no es completa, pero por lo menos ilustra la gradación del espectro, van ordenadas de más descarada hasta más sutil:
  1. Relaciones sexuales con uno o muchos entes, personas o animales no autorizados. Relación sexual en este contexto significa dar o recibir penetración con pene en cualquiera de los orificios corporales de un ente, persona o animal.
  2. Sexo oral con uno o muchos entes, personas o animales no autorizados: Sexo oral significa tratar el órgano sexual del sujeto o sujeta meta como si fuera un helado o mantecado de vainilla.
  3. Dar o recibir masturbación: Esto incluye, además del acicalamiento descarado de el pene, clítoris o vagina; roces genitales intencionales, como bailar reggaetown o cualquier otro baile que sirva como preámbulo para una erección o humedecimiento vaginal; restregar los órganos sexuales una y otra vez en un abultamiento de gente, como el bus por ejemplo; hacerse exámenes médicos que acaricien repetidamente, sin propósitos clínicos, las glándulas que dan placer al ser humano, entre otras.
  4. Besos bucales de persona a persona, de boca a boca con una duración que va desde una fracción de milésima de segundo, hasta esos que duran horas y horas en los concursos de besos. Pueden incluir o no el uso de la lengua, ambos son considerados como infidelidad.
  5. Besos en cualquier parte del cuerpo que tengan una duración o sitio fuera de lo convencional. Por ejemplo, un beso en la mejilla está permitido en muchas culturas, pero si ese beso sobrepasa los 5 segundos se pueden ganar un bofetón de su pareja o parejas. En cuanto al sitio, casi que sólo la mejilla, mano o frente son permitidas. Por ejemplo, un beso en la nalga de un ente, persona o animal no autorizado que dure aunque sea media fracción de milésima de segundo le puede costar la relación a cualquier hombre o mujer que se atreva a hacerlo y ser descubierto.
  6. Abrazos: Un abrazo puede ser infidelidad incipiente cuando conlleva a la masturbación, o bien, su duración excesiva puede causar una erección del pene o un humedecimiento vaginal. Otros agravantes del abrazo tienen que ver mucho con el sitio donde se coloquen las manos que rodean el cuerpo del sujeto, sujeta o sujetos que se abrazan. Por ejemplo, si las manos van directo a las nalgas, o bien si el abrazo es invertido, es decir la persona que es abrazada es sujetada de espaldas por el abrazador generando un contacto directo de genitales con los glúteos y facilitando la toma de pechos o senos por parte de quien abraza.
  7. Caricias en partes prohibidas extra-genitalae: Esa palabra recién la inventé. Básicamente son caricias frecuentes en cualquier parte del cuerpo que impliquen erotización automática.
  8. Voyerismo: Este es medio freaky, pero básicamente se refiere a realizar cualquiera de los actos anteriormente mencionados, o cualquier otra manifestación sexual que puede rayar de enfermiza enfrente de otros entes, personas o animales no autorizados. El voyerismo puede ser un crimen cuando su práctica se lleva a cabo en frente de personas que tampoco consintieron apreciar tal espectáculo.

Como pueden ver la mayor parte de las manifestaciones de infidelidad sexual tienen que ver con la intermediación erótica del cuerpo. Es decir, no se pueden hacer sin la pasión carnal.

Usualmente, estas acciones no actúan de forma aislada, sino que se confabulan en equipo en un juego erótico que culmina en el coito. Ese juego puede ser un proceso evolutivo que empieza con miradas y termina con extravaganzas sexuales. Otras de estas manifestaciones, en muchos contextos no se catalogan como infidelidades, pero sí son señales de peligro que la víctima puede olfatear como el principio de un oscuro túnel que lleva hacia el engaño, y por lo tanto son contrarrestadas y repelidas rápidamente.

Veamos entonces que otro tipo de manifestaciones existen...

Tipos de Infidelidad Primera Parte

Estimados mártires de la fidelidad. ¿Cuántas veces les han "dado vuelta"? ¿Cuántas veces han violado las leyes de su relación de pareja anhelando a un agente externo a su relación?

Preguntas álgidas ¿no creen? Me pregunto si el número de hits a este sexoblog aumentaría si incluyo más veces la palabra infidelidad en su contenido...Nada se pierde.

Primero empecemos por definir qué pelotas es infidelidad. La respuesta no es sencilla. Mejor dicho, no hay respuesta que se pueda acomodar a todos los sabores y colores que conforman nuestras concepciones de lo que es lealtad en una relación de pareja, de grupo o lo que sea. Lo mejor que se puede hacer al hablar sobre este tema es acercarse a la noción más popular, la cual definitivamente será la que le deje menos espacio a la infidelidad en todo sentido. O sea, la noción más estricta, más dogmática y más inflexible. Así nos garantizaremos una definición popular.

Bueno, basta ya de cinismo. Aquí el punto que quiero hacer es que no sólamente la definición de fidelidad esta contextualmente definida según la historia o pasado de un individuo, sociedad, pueblo o familia, sino que también, desde el punto de vista popular, hay varios tipos de infidelidad.

Entonces, partamos del hecho de que infidelidad es cualquier acción en el mundo interno o externo -más adelante explico esto- que vaya en contra de las normas explícitas o implícitas de una relación de pareja o de grupo con respecto a la aproximación sexual o romántica a un ente, persona o animal no autorizado por ese sistema de reglas, será considerado como infidelidad.

Habiendo dicho eso, sírvanse encontrar en el siguiente artículo, una lista de tipos de infidelidad.

Absolom

jueves, 1 de mayo de 2008

La democratización del Striptease




Sudado y agotado por 90 minutos de entrenamiento físico en mi gimnacio, me dispuse a salir del recinto mientras enjugaba mi sudor en mi toalla. Pasé por mi gafete y mi chaqueta a la recepción de la palestra y mientras esperaba por ellos noté un anuncio colocado justo en la parte frontal del escritorio:


Clase de Belly Dance y Striptease
Mañana Lunes: 8-9

Evidentemente captó mi atención y lo único que mi perversa mente pudo imaginar fue a una morena semidesnuda deslizando sus encantos por un tubo plateado, rodeada de espejos y de viejos barbudos y gordos anhelando tan sólo una caricia de la mujer (!está bien! ya sé que no son sólo viejos barbudos y gordos!). Mientras divagaba en esa quasi-fantasía sexual, fuí interrumpido por el fortachón de la recepción, quien amablemente me entregó mis pertenencias. La nube libidinosa que reposaba en mis pensamientos se esfumó, y volví a la realidad: Quienes tomaban clases de belly dance y striptease no eran mujeres cuyas difíciles condiciones sociales les habían empujado hacia una labor que les daba réditos más cuantiosos que lo que el mercado laboral tradicional podría darles. Tampoco eran doncellas que se aprovechaban de la objetificación de la mujer en esta sociedad machista y decidían contradecir las normas de moral de su cultura para poder llevarle leche a sus niños. !NO!, quienes iban a participar en esta lujuriosa clase eran amas de casa de clase media alta, profesionales, gerentes, esposas de gringos adinerados, gordillas coquetas que manejaban un porshe y hasta niñas!

Debo aceptarlo, las imágenes de amas de casa y mujeres profesionales bailando streaptease en el piso de madera de mi gimnacio, me excitó más que ver a Amber y a Tiffany pintorreadas, en hilo dental, y teniendo sexo con el tubo de una tarima iluminada con luces de neón en el Night Club más cercano. Lo primero que pensé es que tenía que hacer bicicleta durante una hora el día de la próxima clase, para así poder husmear a través del vidrio polarizado, y ver que limosna de imágenes captaban mis ojos de tal espectáculo sexual sin precedentes en mi experiencia: 50 mujeres bailando sensualmente, sin cobrar, sin difíciles condiciones socio-económicas, sin cuatro paredes a su alrededor y con dos o tres títulos académicos a su haber. Lo único que estas damas podrían tener en común con Tiffany y Amber era que movían sus caderas sensualmente, el hilo dental estaba por debajo de su ropa deportiva y....sí, !Habían espejos en la sala de baile!


En fin, dejemos de lado mis impulsos testosterónicos del momento y pensemos un rato en porqué demonios un puñado de mujeres decentes deciden copiar bailes sensuales (belly dance) y lascivos (striptease) estando estos últimos arrinconados por la sociedad para mujerzuelas que sin razón alguna también son despreciadas por la colectividad y cuya imagen pública está desmembrada. Créanme, no tengo nada en contra de las putas, las estimo mucho y estoy seguro que muchas de ellas son profesionales en lo que hacen, y fuera de su "oficina" son mujeres muchas veces hasta más decentes que otras que con costos se les puede encajar una polla de lo rígidas que son (eso es broma). El punto aquí es que, dejémonos de cosas, las putas, trotacalles, trabajadoras del sexo, percantas, perras, zorras, prostitutas, mujerzuelas, mega-putas, o como quieran llamarlas, usualmente son relegadas y despreciadas por la sociedad convencional. Yo no apruebo ese desprecio, !pero esa misma actitud moralista e hipócrita de la gente es lo que me llama la atención cuando veo a féminas que bien podrían ser mis compañeras de trabajo en la clase de striptease de mi gimnacio!
El tema de las putas y de porqué son putas toquémoslo en otro momento -ya sé que debería de utilizar el término trabajadoras del sexo, que es más respetuoso, pero para que se entienda mejor, utilizaré el calificativo más popular-, por ahora quiero enfocarme en la vecina del frente que hace movimientos sexys, como teniendo sexo con el hombre invisible en el salón de baile de mi gimnacio.

Okay, entonces, ¿qué hace que una mujer quiera imitar a una stripdancer? En primer lugar, las stripdancers y demás fuerza laboral encargada de los menesteres sexuales, explotan la economía de aquellas personas que se convierten en los depositarios sociales de la represión sexual que sufre nuestra sociedad. Es decir, como desde pequeños nos educan para contener nuestra energía sexual, crecemos con un acumulado, ese acumulado, en el contexto cultural, crea patologías sociales, una patología social puede ser padecida por sólo un extracto de los miembros de la colectividad, quienes actúan tal patología hablan por toda la sociedad en sí. Dicho de otro modo, si de cada 10 hombres 5 visitan night clubs o puteros frecuentemente, esos 5 hablan por toda la colectividad de los 10. O sea están mostrando un síntoma social que tiene orígenes en la interacción de esos 10 hombres, y de alguna u otra forma todos son partícipes y responsables de ella. Desde el punto de vista femenino, las putas lo que paractican, por dinero, es lo que otras mujeres no están dispuestas a hacer en el contexto de la intimidad con su pareja debido a cánones sociales, valores religiosos y otro tipo de normas culturales arraigadas en el acervo sociológico (dígase sexo oral, anal, desdefrenado, grupal, 18 posiciones en lugar de dos, emulación del orgasmo digna de un oscar, etc.) Como estás trabajadoras del sexo cargan con la represión que otras mujeres no osan manifestar, se enferman. Se enferman porque la carga es mucha y llevan entonces su lenguaje sexual a un límite patológico que se mezcla con otras disfunciones sociales, como la pobreza, la falta de equidad y la violencia doméstica. De esta forma, los hombres que deciden ir a un Night Club, hablan por la represión sexual de otros hombres que prefieren no hacerlo (ojo hay miles de formas de descargar la represión sexual, ir a un putero no es la única de ellas) y por lo tanto corren el riesgo de enfermarse socialmente, ya sea convirtiéndose en adictos a esos lugares, gastar cantidades astronómicas de dinero para que les chupen la polla, o convertirse en incapaces de seducir a una mujer sin que haya un intercambio de mercancías de por medio (tampoco estoy diciendo que todos los jelipollas que van a un putero es porque están enfermos socialmente, pero de igual forma su comportamiento dice algo del contexto social en el que se desenvuelven). La enfermedad psico-sexual del hombre, como cargador de las represiones sexuales de su entorno, converge con la enfermedad psicosexual de la mujer, que más o menos delega el erotismo, la sensualidad y el atrevimiento propio de esos ambientes nocturnos, en un grupo de mujeres que lo actúan enfermizamente -en muchos casos más no en todos- debido a que llevan sobre sus espaldas el acumulado de energías sexuales que muchas féminas jamás se atrevieron a mostrar (acumulado de siglos por cierto). Esto las convierte en un producto exótico, muchas veces caro, y apetecido por aquellos hombres que han preferido no invertir sus represiones sexuales en otras actividades ajenas al coito.

¿Qué putas tiene que ver todo esto con el tema inicial de clases de striptease y belly dance en mi gimnacio? Bueno, aquí voy.
Resulta que la sociedad y la cultura son capaces de auto-sanarse. Desarrollan sus propias curas -buenas o malas- para las disfunciones sociológicas que emergen en un grupo o nación. Podríamos denominar esta capacidad como autopoiesis social. Las clases de belly dance y baile erótico son simplemente una forma de la sociedad de sanar la represión sexual que históricamente ha sido delegada en las pobres trabajadoras del sexo -o en una forma más sutil, por las bailarinas del vientre- y entonces la danza erótica, el despliegue de belleza femenino combinado con la sensualidad inigualable de su belleza empieza a democratizarse entre mujeres libres que ahora pueden darle rienda suelta a su intrínseco deseo de comunión, a su exquisita capacidad de contornearse suavemente, a su naturaleza brillante, a su capacidad de ser vistas y adoradas por sus encantos.

50 mujeres se prepararn para ser strippers domésticas, saldrán de sus clases satisfechas con su capacidad de mostrar y de mostrarse, de ser admiradas y salvo algunos cuantos santulones jelipollas, nadie las calificará de prospectos de mujerzuelas. Ellas no cobran dinero, pues su erotismo es un regalo para ellas mismas...

Hay un tema muy escabroso, que es el de la cosificación de la mujer. ¿Serán estas princesas hermosas simples mujeres sumisas que buscan agradar los repugnantes instintos de cosificación del macho man? ¿O simplemente mujeres más evolucionadas que han decidido romper barreras y nadar en la piscina del erotismo que históricamente -al menos en esa forma- se les ha prohibido ? Talvez depende de la mujer. El punto es que cualquier manifestación erótica de las Diosas de belleza despertará instintos animales en el macho, y ya sabemos a lo que llevan las manifestaciones patológicas de ese instinto. De ahí la cosificación femenina.
De todos modos, si una mujer es lo suficientemente atrevida para moverse como si estuviera teniendo el mejor orgasmo de su vida en una sala con otras 50 mujeres y pagar por ello, es probable que también tenga el potencial para no dejarse cosificar por ningún gorila neanderthaliando que ande por allí.

Para finalizar, el erotismo es intrínseco al ser humano, sea hombre o mujer, cualquiera que piense que es un arrebato masculino está demente. Hay formas sanas de erotizar, formas patológicas, y ambas manifestaciones pueden originarse tanto en la femeneidad como en la masculinidad.

La otra semana voy a sentarme en la bicicleta más cercana al cristal de la sala de baile. Vamos a ver qué encuentro. Les cuento cómo me va.

Absolom

sábado, 16 de febrero de 2008

Lo femenino y lo masculino en el sexo


Hoy estuve navegando por decenas de blogs sobre el sexo. ¿Mi afán? investigar, conocer, compartir, dejarme contagiar por los atrevimientos de otros escritores y escritoras de la blogosfera. Obviamente no pude evitar encontrarme con un mar de sitios pornográficos donde lo que predomina es la visión masculina del sexo. Volar culo, coger por el ano, mamadas, doble penetración, lesbianismo, y un montón más de sexéteras.

Como macho que soy, las formas masculinas de ver la sexualidad resuenan en todos los rincones de mis neuronas y de mis hormonas sexuales. Es decir, son ricas, sabrosas, exitantes. Despiertan en mí el arquetipo del Harén del que muchos hombres somos presa. O sea, vivimos angustiados por no poder tener coito con cuanta doncella se nos antoje. La visión masculina del sexo está buenísima. No creo que tenga nada de malo, desde luego que hay manifestaciones insalubres de esta visión, al igual que las hay en la perspectiva femenina. Pero nuestra historia en el planeta hace que la balanza esté muy inclinada hacia formas masculinas de ver el sexo. Lo vemos en los periódicos, revistas, anuncios, películas. !Cada 10 minutos veo una tanga sexy o un hilo dental bien caliente!

¿Como hacemos para que la visión femenina del sexo, de la cual me declaro un poco ignorante, pueda empezar a inclinar la balanza a su favor? Ya estoy cansado de la dictadura del monosexismo machuliento. Quiero un poco más de pasión, de seducción, de preámbulo erótico, de enamoramiento, de caricias que no culminen en penetración.

No me vayan a mal entender, la visión masculina es necesaria para que el Ying Yang quede completo. Lo que pasa es que necesitamos darle más espacio a la energía fememina. Energizar nuestras vidas con el riquísimo espectro de sabores eróticos de las diosas del sexo.

Princesas, reinas, damas, doncellas. Las necesitamos. Necesitamos su versión de XXX. Que el mundo sea de ambos.

Absolom.

sábado, 9 de febrero de 2008

La raíces de ser Swinger #1


¿Cuáles son las raíces que están bajo el árbol de las relaciones lujuriosas que dan origen a una pareja Swinger?


En un artículo anterior exploramos este tema brevemente, pero creo que vale la pena navegar más por algunas teorías que tengo alrededor de las razones del Swingerismo.

Para empezar, ¿Qué es una pareja Swinger? Es una relación establecida, independientemente de su tipo de vínculo , puede ser unión libre, noviazgo o matrimonio, lo que sea. Es importante el adjetivo establecida o consolidada, porque hay muchas parejas por allí que sólo se juntan para ir a desenlazar sus fantasías sexuales, pero que ninguno de los dos tiene un vínculo afectivo o interés de largo plazo en la relación. Para efectos de este artículo, una pareja swinger es una pareja que tiene una relación de largo plazo con sus bases sólidas. El resto de parejas que hacen intercambio pues simplemente son amigos con tipos sexuales intensos. (El artículo anterior a este habla de lo que son Tipos Sexuales)


Ok, entonces ¿Qué hace que una pareja ya establecida tome la determinación consensual -no una manipulación flagrante del macho- para poder abrir su relación a otras parejas o personas?


Estas son algunas de mis teorías. Es importante recalcar que no son condiciones aisladas y determinantes cada una por sí solas, sino que más bien, es un rompecabezas de motivos que se mezclan en una ensalada de sensaciones, pensamientos culturales y registros psicológicos. Cada pareja tiene su propia mezcla de razones.


Experiencias decepcionantes en su vida romántica: Muchas parejas swinger están compuestas por personas que han vivido en carne propia, una y otra vez, la destrucción de sus relaciones sentimentales basadas en los patrones aceptados por la sociedad, gracias a los desbarajustes de la sexualidad humana. Infelidad tras infelidad, ya sea como víctima o victimario, muchos integrantes de parejas swinger han llegado a la conclusión que la única forma de tener una relación libre de los conflictos sentimentales que surgen ante la traición sexual y romántica, es cambiar la propia definición de traición sexual y romántica por una más tolerante. Estas parejas se han dado cuenta que los celos, por más intensos que sean, no son una garantía de fidelidad y que más bien, desestabilizan la pareja hasta el punto de tener un efecto contrario al que se proponen. Hombre y mujer, entonces, llegan a hacerse un test de honestidad el uno con el otro, donde aceptan que el camino más viable para la estabilidad sexual y emocional en la relación, es diseñar un nuevo set de reglas para la misma. Desde mi punto de vista no es el único camino, pero al menos es el que exploraremos aquí.

Esto no significa, desde luego, que todas las personas que tienen continuas decepciones románticas en su vida, gracias a la infidelidad, van a terminar en un jacuzzi con 3 personas o más. Lo que significa, es que hay una marcada tendencia entre las parejas swinger, a estar conformadas por personas que decidieron botar el castillo de naipes sobre el cuál se basan las relaciones sentimentales más convencionales hoy en día. Esta determinación de derribar los antiguos paradigmas sexuales y matrimoniales, muchas veces surge ante la necesidad de evadir el sufrimiento que trae consigo la infidelidad en una relación de pareja.


Próximamente estaré publicando el resto de las piezas del rompecabezas. Por ahora piensa cómo has reaccionado ante la infidelidad en tu vida. ¿Vives engañado? ¿O prefieres evitar el tema porque te incomoda?
Absolom

miércoles, 9 de enero de 2008

Swinger: Estabilidad familiar y Lujuria Sexual se unen



El fenómeno swinger como que se ha vuelto muy popular en estos días. A mi parecer cada vez son más las parejas que se apuntan en este estilo de vida, que por cierto, tiene múltiples variaciones y que también son varias las razones por las que se produce. El intercambio de pareja es una práctica que se lubrica, entre otras cosas, por el crecimiento económico de las familias. Donde la independencia material de ambos miembros de la pareja hace que haya mayor tolerancia para arriesgar la estabilidad de la relación con una práctica que va en contra de los cánones culturales de las sociedades más convencionales.

El fenómeno es muy complejo, yo sólo voy a comentar sobre algunas opiniones personales que tengo acerca de él, pero la verdad es que hay mucha tela que cortar sobre el tema. Una de las razones por las que las parejas recurren al intercambio swinger es porque quieren combinar lo mejor de dos mundos: compromiso romántico y estabilidad familiar con variedad sexual. En el mundo tradicional estos dos beneficios son como el agua y el aceite. Si quieres variedad sexual, tienes que ser un Don Juan solitario que nunca tendrá una compañera confidente con quien compartir sentimentalmente. Si eres mujer, pues tendrás que escabullirte entre las sombras de la sociedad para evitar ser catalogada como zorra, puta, percanta, pécora, mujerzuela, no sé cuántos calificativos más le tendrán en iberoamérica. Probablemente una mujer en estas condiciones no resista la soledad, que es un poco más tolerable para ciertos hombres. De esta forma, el intercambio de pareja se pone al centro de la balanza, una pareja que ha logrado establecer un sistema de reglas bajo el cual la variedad sexual se permite, puede saborear la seguridad de contar con una familia estable y al mismo tiempo satisfacer los impulsos sexuales que nos empujan hacia la exitación de un encuentro sexual con alguien nuevo.

Entonces, el fenómeno swinger se vuelve una forma de supervivencia del núcleo familiar. En el mundo tradicional, la infidelidad en sus múltiples sabores tiende a desestabilizar a la familia, y en el peor de los casos a destruirla, debido a la incapacidad de las sociedades de aceptar las facetas más primarias de su sexualidad. Expander la noción de fidelidad hacia un modelo donde ambos conscienten la satisfacción sexual con terceros, es una solución a esta deficiencia social que pretende cercenar el impulso biológico de variedad sexual que caracteriza a la humanidad.

Aún así, el estilo de vida swinger podría catalogarse como una salida sencilla a la problemática de represión sexual. Muchas parejas pueden considerar ese estilo de vida cuando aún no han explotado todo su potencial erótico como cónyugues. Esto sucede porque el organismo prefiere dejarse absorber por la magia de un encuentro sexual con una persona a quien no nos hemos cogido, que tener que hacer un esfuerzo consciente de vivir el presente con su pareja actual y disfrutar de la sexualidad aunque se hayan cogido 10 mil veces. Esto quiere decir que el ser humano tiene una capacidad poco explotada de satisfacerse sexualmente con una misma pareja en el largo plazo, pero la pereza de utilizar ese potencial hace que nos inclinemos más hacia la variedad sexual, que es la opción más fácil biológicamente hablando. Entre tanto que el goce sexual monógamo requiere de facultades que están menos desarrolladas en nuestra psique, pero que apelan a aspectos más evolucionarios de la humanidad.

De todos modos, ambas alternativas, -la variedad sexual vs. el goce pleno monógamo- son totalmente viables y hasta se pueden combinar para un disfrute erótico más integral. Siempre y cuando sea una elección consciente de la pareja.

Otra cuestión que muchas veces se pasa por alto son los tipos sexuales. Es posible que la naturaleza haga a ciertos seres humanos más aptos para la variedad sexual que a otros. Simplemente algunas personas tienen una tendencia intrínseca a explorar más beligerantemente sus energías sexuales, ya sea por razones fisiológicas (mayores niveles de testosterona), sociológicas (culturas "abiertas" al sexo como la brasileña) y psicológicas (personalidad complaciente o erótica). Si una pareja está conformada por dos personas de tipo sexual con tendencia hacia la monogamia, entonces no sentirán el pellizco hormonal que mueve a otras parejas hacia el swingerismo. En cambio, si ambos tórtolos son de un tipo sexual con orientación polígama, será más propensos a buscar intercambio de pareja, esto si los obstáculos sociales y personales se lo permiten.

Lamentablemente muchas veces las parejas se unen cuando ni siquiera son conscientes de su tipo sexual, y esto causa una disparidad que genera conflictos psicosexuales en la relación. Algo importante que hay que aclarar es que una persona que tiene una orientación sexual hacia la variedad no significa que tenga la madurez psicosexual para establecer un vínculo tipo swinger. Pues para esto se requiere trascender los cánones y reglas tradicionales que rigen a una pareja convencional. Por ejemplo, si un hombre con tipo sexual variado quiere tener sexo con múltiples mujeres, pero su madurez sexual le impide renunciar a su ilusión de posesividad sobre su pareja, entonces preferirá serle infiel a escondidas. Pero si su madurez le permite trascender su ego y evolucionar su mecanismo de protección y forma de celar a su pareja, entonces estará en la disposición de compartirla con otro macho o hembra. Por esta razón, las parejas swinger tienden a evitar el contacto con hombres de poca madurez sexual y tipo variado. No sólo porque hay demasiada variedad de este tipo y resulta poco novedoso, sino que también puede irrumpir negativamente en el sistema de reglas swinger, que se caracteriza por un código moral que expande los límites de la infidelidad.

En conclusión, madurez psico-sexual y tipo sexual son dos cosas aparte. Las parejas swinger más consolidadas tienden a tener madurez psico-sexual por encima del promedio y tipo sexual variado. Esto no quiere decir que las parejas monógamas no puedan tener altos índices de madurez psicosexual. Desde luego que lo pueden tener, pero la forma en que ejercen esa madurez es a través de otros mecanismos que dejan por fuera la inclusión de terceros en sus interacciones sexuales.

¿Cuál es tu tipo sexual? ¿Te consideras maduro psico-sexualmente hablando? Escríbeme


Absolom